Desde el Colectivo Estudiantil Alternativo (CEA) queremos mostrar nuestra solidaridad con las y los
compañeros del SAT-Sindicato Andaluz de Trabajadores por lo que vamos a
autoinculparnos como cómplices de la expropiación de alimentos.El pasado martes 7 de agosto expropiaron alimentos de primera necesidad en Mercadona de Écija (Sevilla), y Carrefour de Arcos de la Frontera (Cádiz) para donarlo a personas desahuciadas y en situación de extrema necesidad. Estamos ante un momento de brutales y escandalosos atentados contra el Estado de Bienestar y los propios ciudadanos, promovidos por las élites burguesas de la sociedad con ayuda de los miembros del Gobierno. La tasa de pobreza en España ha aumentado desde el año 2007 hasta situarse en una de las más altas de toda Europa, con un 21,7%.
Un excesivo
número de familias ve cómo su presente es cada día más incierto: se les ha
echado de sus casas (pese a tener que seguir pagando la hipoteca de esa casa a
la que jamás volverán), no tienen trabajo y muchos días apenas tienen qué
comer. Así, en vez de recibir ayuda por parte del Estado, este no hace más que
pisotear, cada vez con más fuerza, lo poco que les queda subiendo los impuestos
para rescatar a los bancos causantes de la crisis, haciendo amnistías fiscales
para que aquellos que han estafado, puedan seguir haciéndolo con total
impunidad, tratando de privatizar la educación pública con el aumento de las
tasas universitarias, así como la disminución de becas y ayudas para comedores,
el programa madrugadores, etc. Además, facilitan que sea la CEOE quien marque
las reglas del juego permitiendo que un trabajador sea despedido a la primera
de cambio, solo porque la empresa declare pérdidas, y que sus condiciones laborales
hayan retrocedido en el tiempo de forma alarmante.
Por
todo ello, desde el Colectivo Estudiantil Alternativo (CEA) consideramos necesario que
se adopten medidas para paliar estos efectos provocados por una pésima y desastrosa gestión
política, económica y social. Así pues, nos sumamos a los numerosos apoyos que
ha recibido el Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) ante las acciones que
llevaron a cabo a principios de mes y las que están realizando en la actualidad,
como forma de denunciar lo que hemos expuesto más arriba. Además, nos autoinculpamos de la expropiación de alimentos de primera necesidad para entregárselos a familias hambrientas. Porque no es lógico, ni cívico, ni ético que haya familias muriéndose de hambre y encima se criminalice a quienes tratan de mejorar su situación mientras se deja impunes a los ladrones de millones y millones de euros de las arcas públicas
¡BASTA YA DE OPRIMIR AL QUE MENOS
TIENE! ¡QUE LA CRISIS LA PAGUE QUIEN LA PROVOCA!
